in

De siestas, sueños y otros angelitos: de una mamá a otras

El sueño de los bebés. Foto: Pixabay

Por Paola Flores M.

Entre todas las mil cosas que nos cambia cuando tenemos un bebé y que extrañamos con locura es -sin duda- el sueño. Desde el embarazo nuestro ciclo se altera, ya sea porque no nos acomodamos con la panza, las agruras, el insomnio o simplemente el bebé no deja de moverse. Dejamos de dormir como acostumbrábamos y viene a nuestra mente la gran pregunta: ¿Cuándo volveré a dormir de nuevo?…

Bueno, dicen las abuelas que jamás, ya que siempre hay que estar pendientes de la criatura, pero aquí les van UNOS TRES ‘tips’ a cerca de cómo enseñar a dormir a nuestro bebé:

1.- Desde la panza

via GIPHY

Cuando estaba embarazada, me daban hasta las cinco de la mañana sin dormir porque mi bebé no dejaba de moverse y lo único que pensaba y me agobiaba era que fuera a ser un bebé con el horario volteado… Así que comencé una rutina. Sí, antes de que nazca le puede enseñar a diferenciar el día de la noche y generarles un hábito de sueño. Para empezar, no comía cosas dulces después de las seis de la tarde porque el azúcar la activaba. Me recostaba un poco antes con la luz encendida para darle oportunidad de moverse. Al acostarnos la posición les da un poco más de espacio lo que genera que se puedan acomodar y mover mejor.  Veía la tele a volumen normal y platicaba con mi esposo naturalmente. A la hora de dormir, apagaba la luz para que notara el cambio y en voz calmada le decía que ya era de noche, le explicaba todos los días que la noche era para dormir y recuperar fuerzas para el día siguiente y le ponía música relajante cerca de mi panza. Con el tiempo, se acabaron las noches de insomnio porque mi bebé jugaba en mi panza.

2.- Genera una rutina.

via GIPHY

Los hábitos son clave para todos los seres humanos y más para los bebés. Les brindan seguridad y hacen más llevaderas las actividades normales del día a día y sin duda la del sueño es una de las más importantes para tu bebé. Cada familia adaptará la rutina del sueño a sus necesidades, habrá quienes prefieran bañar a su bebé por las mañanas o por las noches, quienes les den de cenar y luego jueguen un poco o quienes les lean un cuento. Lo importante es que seas constante para que al bebé le sea más fácil adaptarse. Lo recomendable, es bañarlo por la noche, para que el agua lo relaje, darle de cenar y mantener un ambiente tranquilo durante la noche, completamente oscuro y sin ruido para que duerma placenteramente.

3.- La importancia de las siestas.

via GIPHY

 Un bebé que no duerme sus siestas, difícilmente conciliará un sueño profundo por la noche, lo cual provoca que se despierte muchas veces por la noche. Hay niños que duermen siestas de dos o tres horas y hay los que con media hora se reponen rápidamente. Todo esto te lo va a marcar tu pequeño conforme crezca, ya que los recién nacidos duermen mucho y poco a poco regulan sus ciclos. Lo más importante es tu paciencia, tu constancia y sobretodo, que disfrutes de cada momento con tu niño. La cuestión del sueño nos abruma porque hay un momento en el que estamos en estado ‘zombie’ y no sabemos ni lo que hacemos; es pesado, muy pesado, pero sin duda, vale la pena. Así que disfrútalo, porque tarde o temprano, va a pasar.

 

 

¿Qué opinas?

Escrito por Unos Tres

¿Usas el cabildeo para tu Pyme?

El big data debe entrar a tu empresa