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Disfruta del tiempo con tu bebé

Juega con los bebés.

Por Paola Flores M.

Si yo pudiera darles solo un consejo a todas las nuevas mamás, sería que disfruten de cada momento con sus bebés. Ya sé que suena trillado, pero nada acelera más el tiempo que tener un bebé… 

Desde que nos enteramos del embarazo, algo pasa en nosotras que quiere acelerar el tiempo. Quieres que se te note la panza, que pase el primer trimestre y en los cursos prenatales hasta parecen una competencia a cerca de quién tiene más semanas…

No puedes esperar a tener al bebé entre tus brazos y de repente, llega ese momento. Ya sea pujando, por cesárea, con epidural o al natural, lo único que piensas es que pronto va a pasar… y si, ¡realmente pasa muy rápido todo! 

Tanto que después hasta te cuesta recordar el dolor y la angustia  y a la distancia incluso pareciera fácil. Llevas a tu bebé a casa y descubres que nada es como te lo platicaron. 

Los momentos duros

No duermes, no le hallas pies y cabeza a tu nueva rutina, vives en la angustia, comienzan los cólicos o el reflujo y escuchas a otras mamás decir que a los tres meses eso se va como por arte de magia. Alguien más te dice que su bebé desde los dos meses duerme casi 12 horas de corrido y te urge que eso suceda.

Cuentas las semanas con desesperación para poder vivir ese momento de plenitud… Cuando tu bebé cumple los ansiados tres meses, observas a la mamá que ya da papillas, su bebé ya se sienta y de todo se ríe. Y piensas, en lo afortunada que es porque ya no tiene a su bebé pegado al pecho todo el día, admiras todas las gracias que hace y te urge ver a tu bebé hacer lo mismo.

Pronto el bebé crecerá

De repente, sin darte cuenta, tu bebé se suelta a darse la vuelta y gatear y llega ese sentimiento. Te llenas de orgullo al ver todos sus logros porque solo tú sabes lo importante que es para su desarrollo… Y recuerdas a aquel ser indefenso que no podía moverse por sí mismo, que te veía entre cerrando los ojos porque le costaba trabajo enfocarte con su mirada. 

Ya no es el bebé que te dice que tiene hambre chupándose la mano adormilado. Ahora grita, ríe, juega y sientes cómo tu corazón se apachurra dentro de ti. Es un sentimiento de melancolía por saber que nuestro bebé está creciendo.

Por eso disfruta, congela cada momento porque no vuelven. Disfruta de los desvelos, las batidas de ropa, haz de la infancia de tu bebé lo más maravilloso y sé la mejor mamá para él porque él te eligió por una poderosa razón que solo ustedes dos conocen.

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Escrito por Unos Tres

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