Unos Tres
Siempre nos ha gustado contar y escuchar historias. Nos gustaba mucho que el abuelo nos relate una anécdota de su vida. Nos gusta aún contar las experiencias de un fin de semana con amigos. En definitiva siempre nos han gustado los cuentos.
¿La tecnología ha arrinconado a la pasión por ver, escuchar o leer cuentos? Carolina Bastidas responde que no. “Precisamente porque estamos viviendo en una época tecnológica, no debe perderse lo hermoso de la palabra hablada y de las narraciones orales”.
Carolina es dueña de la librería el Oso Lector. Y ella es una contadora de cuentos. “La necesidad de contarnos unos a otros historias es intrínseco en el ser humano. Nos gusta escuchar historias, nos gusta contar historias”.
Un iPad puede ser el adversario de un cuento
Los dispositivos móviles se suelen llevar toda la atención. Los propios adultos pasan horas frente a una pantalla de un celular, pero la historia tiene poderes. “La tecnología no es enemiga de un libro. Los niños nunca dejaron de querer escuchar historias. Son los padres los que dejaron de contarlas”, insiste Bastidas.
En la experiencia de la propietaria de la librería, a los pequeños les gusta incluso los silencios que tienen los cuentos. “Hay un momento de paz y de silencio y eso a los padres les incomoda. A los niños no, lo veo desde mi experiencia, se sienten tranquilos”.
La inmediatez, la interactividad y las luces hacen parecer que todo va rápido. En el mundo del cuento es necesaria la calma. Durante una lectura de cuento se pueden ver las ilustraciones para que los pequeños se las imaginen. También se promueve la relación con el libro y se apropien de él.
Usted puede contar un cuento a un niño
Un lazo se construye entre padres e hijos, por ejemplo, cuando se va a pescar. En esos momentos de silencio se puede contar un cuento. La calma es un buen contexto para narrar una historia.
En la cama, calientitos, relajados y con luz tenue. Ese momento también es el adecuado para leer un cuento. “Cuentas una historia para dormir”, explica Bastidas. Pero también es un momento para relacionarse.
Se debe buscar un libro grande en el que quepan padre y niño, madre e hijo. “Los niños deben percibir que de verdad queremos contar el cuento”, aconseja porque si se dan cuenta que solo es para dormirlos, se mantendrán despiertos.
Los consejos para leer el cuento
- Modular la voz.
- Realizar gestos.
- Selecciona un buen tema.
- Busca libros ilustrados.
- Es importante que los textos tengan rima
En las redes sociales de El Oso Lector se publica la agenda para contar cuentos. Cada mes hay sábados para esta actividad, la que se realiza durante 45 minutos desde las 11:00. Pueden asistir niños desde 3 años en adelante (incluso adultos) y no tiene ningún costo.
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